Sobremesa - Page 2

Era martes y su marido estaría fuera hasta tarde: cena de negocios. Cuando la idea de salir se posó en su mente, las manecillas del reloj rozaban las siete de la tarde.

Sepa usted disculpar Señorita estas palabras, pero he de decir: que por usted siento un miedo terrible. Un temor que no llegue a sentir jamás en toda mi vida, y que me impide moverme

Tenía 7 años cuando la conocí en esa casa tan desgastada por el tiempo que combinaba  con la escenografía del pueblo. Los poros de las paredes de cemento la ayudaban a  respirar

Auto-corrector. Los leones tontos Se juntan y se leen. Entre ellos se copian Se echan en cara las faltas De ortografías. Son un ejército de leones. Usan bufanda en verano Y en invierno beben

Hoy desperté de una pesadilla. Te mentiría si dijera no recordarla, pero contarla estaría de más. Su papel fue el de despertarme y arrebatarme el sueño.  No puedo dormir. No puedo dormir.

En el momento exacto que un corazón deja de latir el tiempo se vuelve más lento para aquellos que lo rodean, se hace un nudo en la garganta y el océano se

ven -dice ella- y los pasos de ansiedad se hacen música en sus oídos no pensé que ibas a venir más pero volviste, volviste y dijiste nunca jamás me voy a separar

Puedo decir muchas cosas sobre mi madre como que es acuario  y que su nombre significa «de los bosques». Podría decir también que le gusta el helado de piñón pero que le

Caminando en la sumergida noche metropolitana, recuerdo en correspondencia la noche porteña. Me pregunto, cómo se verán las estrellas en la altura, sentados en las butacas de ese anfiteatro colosal que llama

Duda. Veo como su semblante se retuerce. La respiración es cada vez más pesada y superficial. Sus latidos aumentan. Palpitaciones holocraneas transitan como lobos de agua por su cabeza. La presión de