Sobredosis de ternura, que te lleva a la locura.
Sobredosis de detalles, que no alcanzan el talle.
Si de amor no se vive, porque cupido insiste,
en la vida llena, pero el alma envenena.
Entre lágrimas converso, del peligro que causan tus besos,
con delirio en ti pienso, entre botellas se esconde,
de lo simple, que no pudo ser,
de recuerdos no se vive, pero de experiencias se escribe.
Historias de príncipes y princesas que están mal contadas,
porque de las decepciones no se habla,
y sí, tengo el corazón roto,
por la sobredosis de mirar tus bellos ojos.
Contando estrellas no pienso en ti,
la luna se torna amarilla,
por la traición que en tu nombre brilla,
y la pirotecnia estalla, entre las murallas.
Y aquellos fines de semana, que a tu lado los pasaba
carcajadas que del fondo me sacabas,
y por milagro hoy el perro me acompaña,
si yo canto, el aúlla.
Si de drogas yo te hablara,
en un dos por tres de tu vida me sacabas,
sí de sobredosis preguntarán,
entre tus brazos despertaba.
La táctica me causa frustración,
la sobredosis de decepción,
me causo ir con un doctor,
que entre letras me diagnosticó,
una sobredosis de desamor.
De mis sueños desperté,
y a mi lado te busqué, pero de nuevo falle,
a tu almohada me aferré,
pero por fin hoy solté.
