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Manual de suicidio

TW:  Este texto no tiene como fin incitar al suicidio ni que la persona que lea el texto se haga algún tipo de daño.   Si presentas pensamientos negativos, por favor, pide ayuda.  estos son algunos números al que puedes acudir: 

– Fundación para la confianza: 1515.

Salud responde: 600 360 7777 

Psicólogos voluntarios: +56967613603 o +56975592366

Bienvenid@, ha llegado aquí porque siente que nada tiene solución, se cansó de la rutina, peleó con un ser querido por millonésima vez o comprendió, por fin, que nada tiene sentido. ¡Bien por usted! Ha encontrado el lugar perfecto Parece que fuese ayer que decidió luchar por última vez con sus pensamientos negativos para enfocarse en la brisa fresca un día de calor o reírse con sus amigos de alguna travesura infantil… recuerde que ya no pensamos en eso. Ahora pensaremos en si comprar una pistola, una soga, un cuchillo o, si estamos cortos de dinero (otra razón válida para llegar hasta aquí), romper un vidrio y escoger un trozo filoso para poner fin a todo. Nuestra guía son siete sencillos pasos que le ayudarán a sopesar su decisión, le dará todo lo que necesita para despedirse de este mundo:

Paso 1: ¿Ha escuchado sobre “lo bonito que es la vida”? Los pájaros cantan, el sol brilla, las plantas florecen, su plato favorito, cómo su madre (si la tuvo y tenían una linda relación madre-hij@) le daba un dulce cuando era niño, su primer amor, la primera vez que se sintió como adulto, los regalos que le dan, su canción favorita. Porque todas esas cosas debe dejarlas de lado si llegó hasta aquí. ¿Ha pensado en eso? No volveremos a este punto. 

Paso 2: ¿Usted profesa alguna religión? Recuerde que para algunas el suicidio es una afrenta. Morir significa un castigo en “el más allá” o la siguiente vida. O podría significar nada más que una reprimenda social, no se preocupe no la escuchará o verá porque estará… bueno, ya sabe. Sin embargo, su familia y amigos sí. ¿Ha pensado en eso? No volveremos a este punto. 

Paso 3: ¿Ha leído filosofía? Algunos filósofos creen que su decisión es la correcta. Muchos creían que el ser humano tiende a la muerte, todo tiende a la muerte. Nuestra voluntad es morir y lo único que se interpone entre nosotros y el sueño de morir es la vida y, bueno, el miedo a lo desconocido (¿qué es la muerte? ¿hay un más allá? Quizás confunde esto con su miedo al éxito o su antropofobia) porque, como señalamos en el paso dos, tal vez sus creencias coarten su propósito. O bien, creen que la vida es un sin sentido al que la muerte pone fin, eso no significa que la muerte tenga significado. ¿Pensó en que importa más? ¿su vida o su muerte? No volveremos a este punto.

Paso 4: ¿Escogió su método? Muchas veces leemos sobre asesinatos o suicidios frustrados porque el implemento escogido no fue el adecuado. Si su intento falla no solo puede terminar en algún hospital psiquiátrico cuando despierte (pues es ilegal matar a alguien, sin embargo, como es a usted mismo, no se lo llevan a la cárcel), sino también se va a causar un gran dolor por nada. Además, si el hospital no lo cubre su seguro médico, usted deberá pagar la cuenta. ¿Ha pensado en eso? No volveremos a este punto. 

Paso 5: ¿Cuándo fue la última vez que hizo algo que le gusta? No juzgaremos gustos, puede ser ver su película favorita o salir a correr o dormir o cocinar algo. Lo que sea que le guste, sintiese, piénselo y luego hágalo. No tendrá nunca más oportunidad de hacerlo ¿Ha pensado en eso? No volveremos a este punto. 

Paso 6: ¿Habló con algún familiar o amigo para despedirse? No lo haga obvio, no levante sospechas. No quiere preocuparlos, posiblemente también tienen problemas, pero eso no quiere decir que no les gustaría hablar con usted una última vez. ¿Ha pensado en eso? No volveremos a este punto. 

Paso 7: ¿Tiene sus implementos? ¿Ha hecho los pasos del 1 al 6? Si es así, siéntese una vez más frente a los objetos que le traerán su fin. Y pregúntese, haga memoria, cuando tenía cinco años ¿cómo quería ser cuando grande? Si su respuesta no cuadra con lo que es usted ahora, NO se levante, NO vaya por los implementos aún. Siga ahí y cuestiónese ¿cuándo comenzó a ir todo mal? ¿Ha pensado en eso? No volveremos a este punto.

Paso 8: Posiblemente está pensando “¿De qué #$% me sirve pensar en que la vida es maravillosa? ¡Yo quiero morirme!” Tiene razón, no me sentaré aquí a disuadirl@ más, posiblemente tiene problemas a los que ya no ve solución. Muy probablemente se ha rendido. Quizás la pandemia fue esa cosa que le hizo click para decir “¿para qué más?”. Obviamente mucha gente le ha dicho que exagera, que busque ayuda, que lo hace para llamar la atención, que tiene por qué vivir. Usted no lo ve o no quiere verlo, no importa. El punto es que aquí estamos. Usted, en su hogar con un cuchillo o pastillas en la mano, esperando a que una señal divina o maligna llegue y le diga “¡No!”. No ocurrirá y parece improbable que su propio cerebro le de la señal que diga “¡No!”. Usted ya está hart@ de las injusticias que ve, escuchó y vivió. Es un mundo de mierda, no se lo voy a negar. Y decirle que vea lo bueno en lo malo, no ayudará. Los pasos del 1-7… son una mierda, no se lo niego. “Hable con sus amig@s” “piense en su familia” “¿Qué diría su dios?”. Lo mandará todo y a todos al infierno porque cree que ellos hicieron eso con usted en un inicio. Tal vez sea así. Su madre no lo cuidó (trabajaba, bebía, era dueña de casa, su padre era el problema, etc.), nunca tuvo muchos amigos (sufrió bullying, era tímido, sus padres le prohibían tener visitas, se cambió mucho de casa o colegio) y los que tiene no saben por lo que pasa (o no lo dimensionan). Su dios lo abandonó porque la vida ha sido muy mala (familia disfuncional, adicciones, visitas al médico, poco dinero, no pudo estudiar, se le murió un ser querido, entre otras). La verdad es que, si yo fuese usted, hubiese tomado el arma también. Pero debe haber algo bueno… ¿cierto? El paso 8 se ha extendido una eternidad así que solo diré, busque ayuda. Puede creer que NO la necesita, quizás ya lo intentó y no funcionó… Vale la pena intentar. Un último esfuerzo, quizás esta vez todo sea diferente. Contra parte de mí le digo que busque ayuda, porque, sinceramente, ¿quién soy yo para juzgar lo que usted quiere hacer? Es su vida, es su derecho. Agarre el cuchillo o láncelo al otro lado de la habitación. El suicidio es su último acto en este planeta, solo piénselo muy bien, regálese una oportunidad. 

Como ha llegado hasta aquí, asumo que el manual aún no surte efecto en su persona. Quizás nunca lo hará. Tal vez, aún tiene dudas. ¿Quién no? Lo invit@ a leer, si es escolar diríjase a linealibre (su número es el 1515), ellos proporcionan compañía y motivación si se sufre de bullying o no tiene buena salud mental. Si es adulto o adolescente y se siente decaído o conoce a alguien que lo esté, pero no lo suficiente como para seguir este manual, le insto, si quiere, a leer algunos síntomas y prevención o saber sobre lo que recomienda la autoridad.  

Me veo en la libertad de recomendarle algunos libros: “Verónica decide morir” de Paulo Cohelo o “Violet y Finch” de Jennifer Niven, ambos tienen adaptaciones cinematográficas. Si desprecia la categoría juvenil, lea “Suicidio” de Édouard Levé (un hombre de 25 años se suicida y su amigo cuenta la historia) o “Anaurí” de Theresa Willms Montt (tras no corresponder el amor de un hombre, éste se suicida y Theresa le dedica unos poemas). Quizás le gusten las obras: “Larga jornada hacia la noche” de Eugene O’Neil (tiene película, habla de alcoholismo, drogas, familia disfuncional), “Cosí” de Louis Nowra (sobre una institución mental con diversos personajes, que tienen TOC o son pirómanos, que le enseñan más a quién los atiende de lo que el doctor podría ayudarlos a ellos). 

Quizás quiere algo más alentador… en ese caso, le recomiendo que vea, lee y escuche lo que a usted le guste. Es su vida, debe vivirla mientras pueda. Espero, le ayude. 

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