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Queridx universitarix

Queridxs lectorxs: 

Desde antes de la pandemia en distintas instituciones se empezó a concientizar más sobre la salud mental en los estudiantes. Ahora con la pandemia se ha incrementado esta conversación de parte de los profesionales y de nosotros mismos, pero, ¿Qué es concretamente la salud mental?

Básicamente, es nuestro bienestar emocional, psicológico y social, en términos bien pachamamicos que estemos en una especie de armonía con nuestro entorno y con nosotros mismos, lo cual afecta de forma directa a cómo nos sentimos y actuamos cuando nos enfrentamos a distintos desafíos. Así, el estado de mi salud mental puede influenciar, el trato con los demás o en el manejo del estrés, que está latente en nuestros estudios superiores.

Le preguntamos a algunos estudiantes de educación superior, cómo es su vida académica sin las interacciones sociales que se generan en las instituciones, es decir, lo que se entiende por salir de casa, estar con pares o salir después de clases. Estas fueron sus respuestas: 

 Estudiante de Ingeniería Civil Química. Universidad Técnica Federico Santa María. 

Miserable, muy miserable. Le quitas todo lo divertido a la vida universitaria. Está todo desbalanceado. Antes era stress + buenos ratos. Ahora solo es estres puro y duro. Y además estás solo encerrado en una pieza y ves la luz del sol un par de minutos al día. Aunque estés en tu casa y tu tiempo de descanso. Te genera culpa no estar estudiando. Entonces no descansas nunca realmente. La universidad está ahí, al lado de tu cama todo el tiempo. No te desconectas”

 Estudiante de Tecnología Médica, Universidad Central de Chile. 

 “Este segundo semestre probé lo que eran las clases online y ya pasados 3 meses estoy mal debido a que a diferencia de las clases presenciales no e podido prestar atención, además de que el profesor nos reta por no responder y por mi parte nunca e podido pues no tengo microfono en mi pc, la pruebas las encuentro que son copiar y pegar pues puedes no estudiar y tener las clases abiertas mientras haces la prueba. Entonces, para mi eso es un 7 asegurado, por último para un estudiante de algo práctico esto no me sirve pues no me ayuda ver videos de como hacer exámenes sin poder practicarlos. Muchas veces me he sentido inutil, y que cuando llegue a las prácticas seré un inutil porque solo sabre teoría y no practica y siento que mis padre pierden dinero por yo solo estar sentado y escuchando a mi profe. Me siento una carga, además, no he podido dedicarme a encontrar pareja” 

Estudiante de Pedagogía en Química. Universidad Católica. 

 “Diría que es una experiencia incompleta. Mucho más agotadora, más difícil, porque le falta la parte humana. Se nota mucho la falta de esas conversaciones, esos cafés al salir de clases, las juntas… En fin, el contacto humano. Además también es perjudicial académicamente hablando, mucho de lo que aprendíamos lo hacíamos juntos, conversando, discutiendo y compartiendo” 

Estudiante de medicina, Universidad Andrés Bello.

  “Antes de la cuarentena, como estudiantes de salud, no teníamos idea si nos iban a necesitar en el hospital por falta de personal o si nos iban a cancelar actividades. De un día para otro, sin aviso, nos suspendieron todo y nos mandaron a la casa. Desde ese momento la Escuela ha vivido al día, ha organizado todo a última hora y ni siquiera saben utilizar provechosamente la plataforma que usamos para las clases virtuales. Han tenido que cambiar coordinadores de ramos porque a algunos el tema digital les queda grande, y aún así en muchos casos se nota la falta de interés de usar esas herramientas. Las reuniones con la Escuela han sido todos los meses, y aunque se les reclama que tienen que ser más proactivos seguimos siendo nosotros los que les proponemos cuándo y cómo hacer las pruebas” 

Estudiante de Ingeniería en Informática DUOC.

 “Ojala poder salir, en mi caso mis amigos ninguno es de santiago, por tanto todos volvieron a sus regiones, lo bueno es que gracias a discord continuamos hablando, a veces jugamos, otras solo ponemos música y tomamos con la webcam y así” 

Estudiante de Ingeniería Comercial Universidad Alberto Hurtado.

 “Para mí la vida universitaria sin la parte social es muy fome, es como ir a la universidad sin ir a la universidad. Encuentro que el encanto de ir a las clases es conocer gente nueva, compartir las diversas cosas que nos pasan en el diario vivir o simplemente ver caras. Si bien no soy muy sociable, siento que me hace falta socializar para distraerme. Pienso que hay mucho más estrés al no socializar con gente que está en nuestra misma situación” 

Estudiante de Terapias Ocupacional, Universidad Bernardo O’higgins

 “Ha sido complejo no tener clases presenciales, por todo lo que está sucediendo. Pero siento que aún así, la universidad nos ha sabido dar las herramientas para que a nosotros no nos cuente tanto. Yo estoy cursando el curso de morfología y es complejo saber dónde está cada parte del cuerpo, sobre todo si no la puedes ver, ni tocar. Me ha estresado sí, he colapsado sí, pero he salido adelante. Además yo tengo una enfermedad que se llama trombosis pulmonar, y en ese sentido los profesores me han ayudado demasiado,sobre todo cuando no me puedo conectar a clases, entonces para mí, no ha sido 100 % estresante, porque me he sentido apoyada por mis profesores” 

Estudiante de Auditoría, Universidad Diego Portales.

 “Como estudiante de auditoría antes de la cuarentena estaba todo normal, partimos con las clases sin ningún problema por parte de la universidad, de mi parte si había incertidumbre de como seria las clases, que pasaria con nosotros cuando decretaran la cuarentena, a pesar de que la universidad ya estaba «preparada» para el tema de las clases online, para mi fue complicado al principio acostumbrarme a estudiar en casa, ya que yo no tenía un hábito de estudio muy definido y tomaba mi casa como un lugar de descanso y la universidad como lugar de estudio, aunque últimamente le estoy tomando el ritmo a las clases ha sido muy estresante la situación” 

Estudiante de derecho, Universidad Alberto Hurtado. 

 «Al comienzo de la pandemia, existía un verdadero caos en la facultad, no se sabía qué plataforma ocupar para efectuar las clases y mucho menos cómo realizar los ramos prácticos que se emplean a lo largo de la carrera. Lo más difícil de tomar clases de manera online, es que el ambiente para aprender no es propicio, pues en casa existen una serie de situaciones y contratiempos complejos que no ocurren en un espacio como lo es la universidad. A pesar, de que la coordinación académica y los profesores han puesto de su parte para que los estudiantes nos sintamos menos presionados ante la compleja situación que afrontamos, el estrés, la ansiedad y el cansancio son persistentes, pues a pesar de que no aprendo de la forma que me gustaría, aún así debo cumplir con todas las responsabilidades que la carrera implica.»

Distintas instituciones, distintas carreras y respuestas similares, un estado psicológico en común, que representa estrés, cansancio y la necesidad básica de contacto humano en el ámbito académico y social. Claramente mantenernos sanos mentalmente se ha vuelto complicado, y esto tiene efectos directos sobre nuestra salud física. Dentro de estos cambios físicos producidos por un desequilibrio en nuestra salud mental, se encuentran: cambios alimenticios, cambios de sueño, tener poca energía, tener malestares sin aparente explicación, sentirse impotente, fumar o beber en exceso, cambios de humor, no sentirse capaz realizar tareas sencillas o habituales, etc. Se nos hace familiar ¿Cierto?   

Si piensas que tu problema de ansiedad o de estrés provocado por la impuesta situación de aislamiento te está afectando al punto que sientes que no puedes seguir con tu vida, es necesario que busques ayuda de un profesional. Probablemente al leer esto hayas arqueado los ojos o perdido la esperanza de sentirte bien, porque te cargan los psicólogos o “no estas loco”, pero queridx lector, es tiempo que dejemos de lado los prejuicios existentes respecto a la salud mental para ser capaces nosotros mismos de velar por nuestra salud, por nuestra mente. El estado de nuestra mente repercute directamente sobre todos los ámbitos de nuestra vida, en nuestra productividad, en nuestra alegría. Si conoces a alguien que pueda estar pasando por un estado similar al que se describió, o puedes invitarlo a ver un profesional o bien puedes ayudarlo a buscar soluciones. 

¿A qué me refiero? Buscar interacciones sociales no necesariamente en persona, podemos juntarnos con amigos por cámara a ver películas, a ver series, todos los días a cierta hora, con el fin de que trabajaras/ estudiaras pensando “en la noche voy a ver el capítulo siguiente con mis amigos, que bueno”. También puedes juntarte a estudiar por Discord u otras aplicaciones similares y escuchar música en grupo, si todos escuchan lo mismo podría generar una sensación de estar con otras personas mientras estudias o realizas otras actividades. No te obligues a estudiar, no te obligues a ser productivo, buenas notas en la u o en el instituto no justifican tu excesivo desgaste mental y el sacrificio de tu felicidad. Organiza reuniones con amigos con diversas temáticas o para juntarse a beber algo, o tal vez jugar Among Us y putear un poco para liberar energías, pinta, canta, baila, o si solo quieres dormir duerme.   

En tiempos donde nuestras vidas cambiaron de golpe solo queda ver lo mejor para nosotros mismo y nuestra salud mental, si las personas que viven junto a ti y comparten contigo a diario significan un perjuicio a tu salud mental, si invisibilizan tus esfuerzos o hieren tu autoestima, busca hacer oídos sordos, la salud mental es un tema que muchos de nuestros familiares no entienden o nunca escucharon hablar de este, intenta hablar con ellos, haz el esfuerzo por explicarles y conversar de lo que sientes, si esto no funciona, recuerda siempre que tu salud mental debe ser tu primera prioridad. 

Te invitamos a decirnos cómo has superado esta cuarentena, como es tu situación, desahogarte, si tienes algún consejo para el resto de nuestrxs lectores dinos, este mes es para ayudarnos entre todos.

Camila Olave

Colaboradora permanente de revista diversas desde su fundación. Es licenciada en lengua y literatura de la universidad Alberto Hurtado e hizo su tesis especializada en la literatura chilena pos dictadura. Es madre gatuna. Dueña de su propia pyme Moo Confections y aspira a ser cuentista.

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